Valladolid es una ciudad de cine. Su largo y férreo compromiso con el séptimo arte ha sido reconocido por Naciones Unidas con el título de ‘City of Film’ y su ingreso en la Red de Ciudades Creativas de la Unesco en la categoría de Cine.
La Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) es el buque insignia de nuestra pasión por el celuloide. Con más de 60 ediciones a su espalda (nació en 1956 como Semana de Cine Religioso y adoptó su nombre actual en 1973), es uno de los festivales más longevos de nuestro entorno. Su férrea apuesta por el cine de autor lo convierte en una de las mecas internacionales de las producciones independientes.
La Seminci puede presumir de haber sido puerta de entrada a nuestro país para Ingmar Bergman, quien se declaró firme defensor del festival vallisoletano. Es muestra de un palmarés ejemplar que ha encumbrado a directores como Akira Kurosawa, Abbas Kiarostami, Goran Paskaljevic, Wang Quan’an o los hermanos Dardenne.
Es, también, parada imprescindible para el cine español. Pocos son los cineastas patrios que no figuran en su historial. Pedro Almodóvar, José Luis Cuerda, Iciar Bollaín, Isabel Coixet, y Pilar Miró son algunos de los cineastas que han pisado su alfombra, como lo han hecho auténticas estrellas de Hollywood como Brad Pitt o Matt Damon.
Si bien la Seminci es nuestra cita obligada con el cine, la ciudad cuenta con otros festivales de referencia, como CinHomo, el único en la región atento al reflejo de la realidad LGBTI en el cine, o Rodinia, una apuesta por el cortometraje.
La programación cultural dedica un hueco de honor al cine: ciclos temáticos en los museos, proyecciones en los centros cívicos o las agradables y concurridas sesiones al aire libre en verano copan las agendas de los cinéfilos a lo largo del año.
Valladolid cuenta con la primera Cátedra de Historia y Estética de la Cinematografía, que nació en 1962 adscrita a la Universidad de Valladolid, y la segunda en Europa, después de la de Pisa (fundada solo tres años antes).
El marcado carácter cinematográfico de Valladolid y sus gentes se ha visto impulsado por las instituciones a través de iniciativas como Valladolid Film Commission, oficina técnica encargada de asistir a las productoras audiovisuales que desean desarrollar sus proyectos en la ciudad de Valladolid y su provincia.
La Valladolid Film Commission institucionaliza, así, el apoyo histórico de la ciudad a los rodajes, que ha sido escenario de películas de Orson Welles o Mario Camus. Desde su fundación, en 2014, ha apoyado rodajes para productoras de Bollywood y para Amazon, entre otras.
Valladolid es también la sede de la Escuela Superior de Arte Dramático de Castilla y León, uno de los principales centros de formación de nuestro país en las especialidades de Interpretación Textual y de Dirección Escénica y Dramaturgia.